El capítulo 54 de Dragon Ball Super «El heredero de la sangre saiyan. ¡La resolución de Trunks!» nos muestra el entrenamiento o más bien aprendizaje de dos personajes clave de la nueva saga de Trunks del futuro. Por un lado, tenemos al aprendiz de Kaiôshin Zamasu, cuyas dudas y recelo hacia los mortales parecen ir en aumento. Su maestro, Gowasu, que es consciente de esto, decide que ya va siendo hora de que su discípulo aprenda a observar a los seres vivos del universo y sus ciclos vitales. Así viajan hacia el planeta Babari, un astro donde sus habitantes aún son seres básicos y viven en cavernas. Así observan cómo estas criaturas tienen una forma de actuar muy bárbara y a la mínima acaban peleándose entre ellos. Entonces Gowasu decide que viajen 1000 años hacia el futuro para comprobar si esta raza es capaz de evolucionar de buena manera.
Para viajar al futuro usan uno de los Anillos del Tiempo. Según Gowasu los Anillos del Tiempo aparecen cuando se crea un mundo alternativo al viajar en el tiempo y explica además que hace unos años apareció un nuevo anillo debido a que algún idiota cambió la historia (¿quién será ese idiota? ¿le habrán pitado los oídos en ese momento a Trunks del futuro?). También explica que estos anillos tan solo pueden viajar hacia el futuro. Y así se embarcan camino al planeta Babari de 1000 años en el futuro. Allí ven que los babarianos han comenzado a desarrollar cierta cultura agrícola, pero sin embargo siguen comportándose de manera violenta atacándose unos a otros, lo cual no ayuda a que Zamasu cambie de opinión con respecto a los seres vivos del universo.

Por otra parte, en la Tierra asistimos al entrenamiento que Vegeta decide otorgarle a su hijo del futuro. Haciendo gala de su Super Saiyan Blue, Vegeta reta a su retoño: si Trunks consigue darle un solo golpe, gana la batalla. Sin embargo, el máximo nivel de Trunks es el Super Saiyan de 2º nivel, con lo cual acaba siendo apaleado por su padre con bastante facilidad. Esto hace que Trunks quede algo abatido y piense que en realidad él no es necesario para derrotar a Black, Goku y su progenitor pueden hacerlo. Dándose cuenta de esta actitud Vegeta indignado le dice a su hijo que si de verdad es un heredero de la sangre saiyana jamás le perdonará que pierda ante nadie. Esto renueva los ánimos de Trunks, que aprovecha el momento para dar un cabezazo a Vegeta, ganando así el round. Finalmente Trunks promete superar a Black e incluso a Vegeta.

Y así este episodio nos muestra la evolución de dos personajes centrales, Trunks y Zamasu, ambos jóvenes e inexpertos, pero con grandes convicciones. A donde les llevarán esas convicciones todavía es un misterio que se nos irá desvelando a partir del siguiente capítulo, titulado «¡Hey, quiero encontrarme con Son Goku! ¡Una citación de Zen’ô sama!». ¡No os lo perdáis!



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